Descubre la explotación ganadera y todos sus entresijos
Desde que el ser humano dejó de ser nómada y comenzó con el pastoreo, comenzó la ganadería, y a raíz de esto, la explotación ganadera. Veamos entonces, qué tipos de explotación ganadera existen hoy en día.
- Explotación extensiva:
Aparece a raíz del pastoreo, se realiza en pastizales o dehesas, lugares con escasos cultivos y con un clima desfavorable. En este caso, se mantiene a animales de escasa productividad y rústicos en un medio desfavorable para el cultivo agrícola rentable y del que dependen en gran medida para su alimentación, con unas exigencias mínimas de capital y mano de obra especializada. Esto último puede variar, dando como resultado varias combinaciones en la explotación ganadera extensiva, pero en general la importancia de la tierra en la explotación extensiva es grande y, por el contrario, su productividad es baja.
- Explotación intensiva:
Su característica identificativa es la desvinculación total de la tierra, y el consumo del ganado depende únicamente de productos externos. Se obtienen grandes rendimientos productivos en el menor tiempo posible, gracias a superficies apropiadas a la cantidad de animales, biotipos con alto nivel de fecundidad, productividad y crecimiento, necesitando de ambiente controlado (humedad y temperatura) y ciclos alimenticios ininterrumpidos y equilibrados. En la explotación intensiva sí que tienen una gran importancia el factor del capital (pues el coste de los terrenos, las infraestructuras tecnificadas y la alimentación es elevado) y de la mano de obra, mecanizándose todas aquellas operaciones que sean posibles para reducir los costes por unidad producida (alimentación, limpieza, ordeño,…) para rentabilizar la alta inversión realizada.
- Explotación mixta o sistema semiextensivo:
En este sistema, el ganado tiene como función dominante aumentar los rendimientos de los cultivos y mejorar el rendimiento global de la empresa agraria. Se fertilizan los suelos gracias a la introducción en las rotaciones de cultivo de plantas forraje que mejoran la fertilidad del suelo y al estiércol, que devuelve al terreno entre el 35 y 40 por ciento de los principios nutritivos obtenidos del mismo.
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